Bitcoin sigue ganando reconocimiento de gobiernos

En los últimos meses, el precio de Bitcoin y demás criptoactivos se viene elevando considerablemente como era de esperarse, y ha sido momento para el reconocimiento y la regulación de Bitcoin y otras criptomonedas por parte de gobiernos de todo el mundo. Este fenómeno se ha visto reflejado en decisiones recientes de países como Rusia y China, países originalmente enemigos de las criptomonedas, donde se han adoptado enfoques distintos, pero cediéndoles terreno. A continuación, exploraremos cómo estos cambios están influyendo en el panorama global de las criptomonedas y cómo las leyes fiscales de varias latitudes en torno a estos activos, abren la puerta para la tenencia legal, especulación y usufructo de ellas.

Si, cada vez hay más reconocimiento de parte de los gobiernos respecto a Bitcoin y las criptomonedas en general, esto se evidencia en una clara tendencia a crear legislación y jurisprudencia que suaviza la relación con inversionistas en este campo.

Reconocimiento de Bitcoin en Rusia

Rusia ha dado un paso importante al reconocer oficialmente a Bitcoin y otras criptomonedas como propiedad. El presidente Vladimir Putin firmó recientemente una ley que modifica el régimen fiscal para la minería y comercio de criptomonedas, estableciendo que éstas son consideradas «propiedad» bajo el Código Fiscal del país [1]. Esta legislación, aprobada por la Duma Estatal y el Consejo de la Federación, no solo marca un hito en la regulación de las criptomonedas en Rusia, sino que también introduce un marco fiscal que exime a las ventas de activos digitales del impuesto al valor agregado (IVA).

Detalles sobre la nueva normativa

La nueva ley establece que las operaciones relacionadas con la minería y venta de criptomonedas estarán sujetas a un sistema impositivo personal con dos escalas: una tasa del 13% para la mayoría de los consumidores, que aumentará al 15% para aquellos cuyos ingresos anuales superen los 2.4 millones de rublos (aproximadamente USD 22,000) a partir del 2025 [1]. Este enfoque no solo busca regular el uso de criptomonedas, sino también facilitar el control fiscal sobre estas operaciones, lo que podría generar ingresos significativos para el fisco ruso.

El reconocimiento de las criptomonedas como propiedad es parte de los esfuerzos más amplios de Rusia para adaptarse a un entorno económico global cada vez más restrictivo, especialmente en el contexto de las sanciones impuestas por Occidente debido a la invasión de Ucrania. Al regular las criptomonedas, Rusia busca explorar alternativas económicas que le permitan operar en un mundo donde las transacciones digitales están cobrando cada vez más relevancia.

La situación en China: un enfoque diferente

A diferencia de Rusia, China ha mantenido una postura más restrictiva hacia las criptomonedas. Aunque recientemente una juez china declaró que Bitcoin es considerado «mercancía» y es legal poseerlo, el gobierno chino continúa prohibiendo su comercio y minería [3]. Esta ambigüedad refleja una tensión entre el deseo del gobierno chino de controlar su economía digital y la realidad del creciente interés global en las criptomonedas.

Implicaciones del reconocimiento limitado

El hecho de que una juez haya calificado a Bitcoin como mercancía podría abrir la puerta a un mayor reconocimiento legal en ciertas circunstancias. Sin embargo, el gobierno chino sigue firme en su prohibición general sobre las transacciones con criptomonedas. Esto contrasta con el enfoque regulador adoptado por otros países, como Estados Unidos y varios miembros de la Unión Europea, donde se están estableciendo marcos legales para proteger a los inversores y gravar las transacciones con impuestos [2].

China parece estar explorando alternativas como monedas digitales centralizadas (CBDC), lo que indica un interés por parte del gobierno en mantener cierto control sobre el ecosistema financiero digital, sin abrirse completamente a las criptomonedas descentralizadas [4]. Esta estrategia podría permitirle a China competir en el ámbito internacional mientras limita los riesgos asociados con activos no regulados.

Tributación de criptoactivos en diferentes países

Los gobiernos ya no pueden hacerse la vista gorda en este tema. Las criptomonedas existen y cada vez son más las personas que las usan como refugio de valor, herramientas de negociación y especulación, o simplemente como medio de pago. Solo les queda legislar sobre ellas, y al resto de nosotros, aprovechar cada oportunidad que se nos ofrezca de la mejor forma que nos resulte posible.

La tributación de criptoactivos varía considerablemente entre países, lo que refleja su reconocimiento, como cada país lo reconoce de forma diferente, cada uno ofrece su propio enfoque hacia su regulación. Seguidamente te presento algunos ejemplos prácticos:

• Estados Unidos: Las criptomonedas son tratadas como propiedad a efectos fiscales. Esto significa que cualquier ganancia o pérdida derivada de su compra o venta debe ser reportada al Servicio de Impuestos Internos (IRS). Las tasas impositivas varían según el ingreso del contribuyente.
• Unión Europea: La regulación es aún incipiente, pero muchos países han comenzado a implementar sus propias leyes fiscales sobre criptomonedas. Por ejemplo, España ha establecido normas específicas para gravar las ganancias obtenidas por transacciones con criptoactivos [2]. Además, los exchanges están siendo obligados a notificar al fisco sobre las transacciones en criptomonedas que realizan sus residentes.
• Rusia: Como se mencionó anteriormente, Rusia ha introducido un sistema fiscal específico para criptoactivos que incluye exenciones del IVA y tasas impositivas progresivas dependiendo del nivel de ingresos [1].
• Australia: Las criptomonedas son consideradas bienes y están sujetas al impuesto sobre bienes y servicios (GST). Sin embargo, desde 2017, las transacciones con criptomonedas están exentas de este impuesto si son utilizadas como medio de pago.

Estos ejemplos ilustran cómo los países están adaptando sus sistemas fiscales para abordar la creciente importancia de las criptomonedas en la economía global. A medida que más gobiernos reconocen oficialmente estas monedas digitales, es probable que veamos una mayor estandarización en la tributación y regulación a nivel internacional.

Conclusión

El reconocimiento creciente de Bitcoin y otras criptomonedas por parte de gobiernos como Rusia y China refleja una evolución significativa en la percepción global hacia estos activos digitales. Mientras Rusia avanza hacia una regulación más clara y favorable para las criptomonedas, China mantiene su postura restrictiva pero comienza a mostrar signos de apertura limitada. La tributación variada en diferentes países subraya la necesidad urgente de marcos regulatorios claros que puedan facilitar un entorno seguro tanto para inversores como para gobiernos.

Como quiera que sea, el que los gobiernos de alguna forma reconozcan a las criptomonedas como propiedad, valor, o reserva de valor, ofrece a la población general mayor confianza y de seguro habrá mucha más demanda de este tipo de activos en el futuro. Como sabemos, a mayor demanda, mayor valor.

Para contextualizar, el año comenzó con un Bitcoin en 42.283,27 USD, y en este momento es de 95.698 USD, un incremento superior al 135%  y sin mencionar que su máximo alcanzó 99.908 USD. Como cualquiera, solo podemos especular sobre cuál será el máximo histórico de esta temporada para Bitcoin y demás criptomonedas, acertar, sería de seguro un evento fortuito. Sin embargo, a medida que este panorama continúa desarrollándose, será crucial seguir observando cómo estas dinámicas impactan no solo en el valor y uso de Bitcoin, sino también en la forma en que se integran estos activos en nuestras economías modernas.